¿Sabías que en 2013, en la revista Nature se hizo público el descubrimiento del agua más antigua del planeta?
Un equipo de investigadores de Gran Bretaña y Canadá realizó el hallazgo a dos kilómetros de profundidad en una mina de oro en Timmins (Canadá).
El agua ha permanecido inalterada y sin ningún contacto con el exterior durante al menos 1.500 millones de años, y aunque está por comprobar, podrían incluso contener alguna forma de vida microscópica, ya que el agua contiene metano e hidrógeno, elementos necesarios para la vida.
El agua es muy salada, y aparte del metano e hidrógeno, también se han encontrado gases nobles como el helio, neón, argón y xenón.
El hidrógeno y el metano se deben a la interacción del agua con las rocas de alrededor. Las rocas que rodean el agua han sido datadas en 2.700 millones de años, aunque el agua no es tan antigua y tiene unos 1.500 millones de años.
Las rocas que la mantienen atrapada son muy parecidas a las de Marte. Se abre así la posibilidad de que haya ambientes similares también bajo la superficie de este planeta.
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Antes de este hallazgo, la única agua con una edad similar se encontró en pequeñas burbujas en el interior de rocas, y esta agua no podía sustentar vida. Pero el agua encontrada en la mina canadiense se filtra por las rocas en una cantidad que se ha estimado en dos litros por minuto.
